martes, 16 de diciembre de 2008

Pero en nuestra actual sociedad hay una tendencia a eliminar la fragilidad, queremos ser admirados más que amados, y eso es un error.
Stefan Vanistendael

sábado, 13 de diciembre de 2008

Personalidad con Super Glue y Estudios Probabilísticos III

La letra es difícil de entender pero pone algo así como “física cuántica”, “probabilidades de entrar en un universo paralelo” y algo más que resulta ilegible.

Mira la servilleta fijamente, concentrado pero sin verla, y de golpe empieza a correr hacia un bicing que hay delante de una de las entradas del Parc de la Ciutadella. Se monta en una de esas bicis roña y pedalea a toda velocidad hacia el Arco de Triumfo.

Cuando está justo pasando por debajo de esa gran puerta que en su día sirvió de acceso a la Exposición Universal de Barcelona, salta y en el aire gira la bici 90º, poniéndola perpendicular al Paseo Lluís Companys. En ese instante desaparece. Pero no la servilleta arrugada, que cae al suelo. Un guiri enmochilado la pisa sin darse cuenta y esta se adhiere a la suela de sus deportivas, volviendo hacia el Parc de la Ciutadella esta vez con nuevo dueño.

jueves, 11 de diciembre de 2008

Personalidad con Super Glue y Estudios Probabilísticos II

Unos cuantos pasos después, se encuentra en el mostrador de una tiendecilla del Born comprando varios quilos de piñones y almendras. Cuando acaba de pagar mete los frutos secos en un par de bolsas negras, de esas típicas que regalan en los gimnasios, y sale a la calle rumbo al parque de la Ciutadella.


Tras un exhaustivo reconocimiento del terreno, se sienta en el trozo de hierba que le parece más adecuado. Saca de las bolsas toda la parafernalia: una báscula, los frutos secos y varios folios llenos de ecuaciones y se pone manos a la obra. En el papel pone: “GOBIERNO” y debajo muchos subapartados como: “probabilidades de X litros de petróleo en Groenlandia y probabilidades de que Rusia consiga los derechos exclusivos de navegación en el océano Glacial Ártico” ó “probabilidades de que China se convierta en la primera potencia mundial y probabilidades de que China entre en guerra con E.E.U.U:” ó “probabilidades de que desaparezcan el 50% de las lenguas del planeta en un siglo”. Después hay otra hoja con el título “PERSONAL” y subapartados como “probabilidades de guerra nuclear y probabilidades de que se descubra que Bush es en realidad un extraterrestre” ó “probabilidades de que se cree una nueva religión y que tenga a Jimmy Hendrix como su Dios” y hacia el final de la lista pone: “probabilidades de ser feliz con un alto coeficiente intelectual y probabilidades de ser feliz con un bajo coeficiente intelectual”.


Por orden, primero mira una cierta probabilidad y después pesa los gramos de piñones o almendras correspondientes y los coloca en un montón sobre la hierba. Así va creando un recuadro de montañas de diferentes alturas.


Cuando ha terminado se separa unos metros y lo mira desde la distancia como si fuera un cuadro.


Pasa más de media hora en la misma posición, moviendo sólo los ojos. Al rato empieza a girar lentamente la cabeza 360 grados fotografiando mentalmente cada detalle: chica sentada tocando la guitarra y cantando a pleno pulmón, acompañada por dos rastafaris palmeando sobre unos bongos; pareja haciéndose carantoñas estirados sobre la hierba; grupo de chavales de algún esplai jugando al pañuelo.

Vuelve a mirar los montones de frutos secos y entonces unos grandes lagrimones se le escapan y caen a cámara lenta, colgándose de sus mejillas y volando hasta aplastarse contra unos centímetros de hierba. Mete la mano en el bolsillo y saca una servilleta de papel, arrugada y con unas letras escritas en boli.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Personalidad con Super Glue y Estudios Probabilísticos (I)


8:37: Coches en el techo del autobús y el mar en las ventanas de un día de mayo. Lluvia de sol y rayos de agua en el paseo marítimo.

Apoya la cabeza en el asiento justo en el momento en que el vehículo se para en un semáforo y piensa en algo así como: “
Cosas. Fragmentos de realidad normales pero bonitos que un día descubres. Detalles que debo tener ya grabados en mi cerebro a centenares y que nunca antes me habían llamado la atención. Y ahora me detengo a mirar porque los veo bonitos, porque no los hay en todas partes. ¿Cómo algo tan común me puede hacer feliz? ¿Cómo no me hacía feliz antes?
Sonríe, dejando al descubierto unos dientes amarillentos y un par de huecos, recuerdo de alguna pelea. Se pasa la mano por el pelo, tan enredado que se le están empezando a hacer rastas, y al rascarse la pierna de manera frenética descubre un nuevo roto en el pantalón.
Se levanta y va hacia una de las puertas de atrás. Estira los brazos, se cuelga de la barra que hay encima y empieza a hacer ejercicios de gimnasio.
Fija la vista en un niño pequeño que va en un cochecito. La madre le hace cosquillas y el niño va soltando carcajadas entrecortadas, con la boca completamente abierta y los ojos medio cerrados de felicidad. Él se les acerca y, dirigiéndose a la madre, suelta:
-Te compro unas cosquillas.
La mujer se le queda mirando asustada y no acierta a responder. Él saca un billete de 50 y se lo acerca a la mano. Ella se aparta y le da la espalda. Él se encoge de hombros y baja en la siguiente parada, delante del edificio de Correos.
En cuanto el autobús cierra sus puertas, él abre la bragueta y empieza a descargar líquido de cara a la carretera. Los que pasan cerca le observan horrorizados y él les responde con sonrisas y un ligero movimiento de cabeza a modo de saludo.

9:00: El marrón-grisaceo del edificio se cuela en sus ojos. Entra y abre la puerta de su despacho, el que tiene la placa que reza: “caso 746: ESTUDIOS PROBABILÍSTICOS”. Se pone el casco lleno de cables conectados y fija la vista en un papel lleno de álgebra. A los dos segundos está escribiendo sin parar, acumulando números y más números, con el brillo del gozo intelectual en los ojos.

En la estantería le quedan cinco maletines metálicos. Coge uno, lo abre, se mete varios fajos de billetes dentro de los calzoncillos y sale del despacho.